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La Comisión Informativa de Presidencia y Recursos Humanos de la Diputación, trató ayer, entre otros temas la creación de la plaza de director/a de la Estación de Leitariegos, tan necesaria como reivindicada desde hace años por nuestro grupo y la Plataforma Leitariegos existe.
El Diputado de Coalición en Común-IU, Miguel Flecha ha trasladado las reivindicaciones de la Plataforma Leitariegos existe, desde el comienzo de legislatura, tanto en la necesidad de poner al día el Plan Director, que se ha conseguido, como en dotar a la Estación de un Director o directora, que acumula un retraso de un año. Todavía recuerda las reuniones mantenidas para poner sobre la mesa las inversiones, las medidas como el Plan Director, y la necesidad de un/a director/a que pilote y tome decisiones en Leitariegos donde la respuesta era que la Ley no permitía la contratación. El tiempo ha dado la razón, aunque podría hacerse mejor, ya que la plaza en cuestión será cubierta por personal laboral en vez de funcionario. Era perfectamente factible dotar de esta plaza a Leitariegos. «Ahora solo queda exigir ligereza en seleccionar a la persona y ponerse a trabajar para desarrollar y desestacionalizar el gran reclamo económico y generador de empleo que queda en Laciana tras el asesinato del carbón nacional por parte del PP» ha comunicado el grupo municipal.
En cuanto a la privatización de San Isidro, urge clarificar de una vez la intención del grupo de gobierno; en IU-Coalición en Común se preguntan si acaso es que nos sobra el dinero en la Diputación Provincial, como para seguir valorando el privatizar la estación. Exigen asimismo, que desde el grupo de gobierno se informe de manera puntual y por cauces oficiales de cualquier movimiento o decisión relativos a agrandar el agujero generado por San Isidro en forma de privatización, y no enterarse por la prensa como viene siendo habitual.
Ninguna Estación de Esquí da beneficios en este momento, de hecho las Estaciones pirenaicas están pasando a la gestión pública porque no son viables si no están unidas al ladrillo depredador, por tanto son Aragón y Cataluña quienes conservan el empleo asumiendo pérdidas. Sería preferible en todo caso, en lugar de una privatización, que la Estación de San Isidro pasara a ser gestionada por la Junta de Castilla y León, con el compromiso de conservar los puestos de trabajo.
Ponerla en manos privadas es una locura ya que no se trata de un tipo de negocio que genere beneficios a una empresa privada, no sólo no se generarían beneficios sino que las pérdidas se seguirían acumulando incrementando el déficit anual ejercicio tras ejercicio. Este hecho, por definición no interesa al sector privado y se traduciría casi con total seguridad en un intento de mejorar el rendimiento empresarial reduciendo la inversión, precarizando los puestos de trabajo y bajando la calidad de los servicios, lo cual no es bueno para nadie.
