FELE no acepta la propuesta para la modernización del mercado laboral

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FELE, al igual que sus patronales CEOE y CEPYME considera inaceptable la propuesta del Ministerio de Trabajo con la que se pretende modernizar el mercado laboral, como han manifestado de forma unánime todas las organizaciones empresariales consultadas en los órganos internos de la Confederación.

Advierte de que estos planteamientos van en contra de la adaptabilidad que necesitan las empresas para poder generar empleo en la actual coyuntura de incertidumbre y transformación, y también de las directrices que nos marca la Comisión Europea en esta materia, con lo que se está poniendo en juego en último extremo la recepción ágil de los fondos europeos que el país necesita para la reconstrucción tras la pandemia.

Por ello, durante la reunión de la mesa tripartita de diálogo social de este martes, las organizaciones empresariales han trasladado la necesidad, para poder seguir negociando, de contar con un planteamiento nuevo por parte del Gobierno, alineado con las necesidades de las empresas y de las personas trabajadoras y de acuerdo con las recomendaciones de país de Bruselas.

En estos momentos, el texto parece responder a una motivación ideológica sin fundamentos económicos; no tiene en cuenta la realidad del tejido empresarial y de las personas trabajadoras, y, por ello, aboca inevitablemente al desencuentro.

Además, a la vista del último documento trasladado por el Ministerio de Trabajo a la mesa de diálogo social, si lo que se pretende es modernizar el mercado laboral, no parece que la mejor opción sea plantear una propuesta que en todos sus elementos es regresiva e intervencionista, restando capacidad a la negociación colectiva.

FELE, CEOE y CEPYME quieren dejar claro que apuestan por unas relaciones laborales de calidad, que permitan un desarrollo fructífero en el seno de la empresa en beneficio de todos. Ese es el marco en el que habría que trabajar, en lugar de partir de la desconfianza y la sospecha hacia la empresa, arrojando a la opinión pública dogmas confusos como la asimilación de temporalidad y precariedad.

Más aún, la temporalidad es un elemento intrínseco a muchas actividades de carácter estacional, con lo que reducirla a un fenómeno residual perjudica la empleabilidad de muchas personas, en especial de las que carecen de cualificación y los jóvenes, en un momento en el que su tasa de paro ronda el 40%, e incluso supera el 50% en muchos territorios.