El leonés de Paz se proclama campeón de España de curling

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El jugador leonés Eduardo de Paz Cureses, que pertenece al club Txuri Berri de San Sebastián, se ha proclamado este fin de semana campeón de España de curling al derrotar en la final al equipo vitoriano del SVC Iparpolo por 7-3, cerrando así un campeonato inmaculado en el que no ha conocido la derrota en ninguno de los once encuentros disputados. Gracias a este título, el primero que consigue un jugador de curling leonés en la historia, Eduardo de Paz y sus compañeros Sergio Vez, Mikel Unanue y Antonio de Mollinedo representarán a España en el Campeonato de Europa “C” que se disputará entre los días 6 y 13 de mayo en la pista de hielo de Canillo (Andorra) y en el que los españoles son uno de los grandes favoritos al título y a lograr devolver a España a la segunda división del curling europeo de donde descendió el pasado mes de noviembre.

Asimismo la jugadora leonesa Beatriz Cureses, integrante del equipo No Name Madrid y madre de Eduardo, consiguió la medalla de plata en la categoría femenina, en una competición dominada también por el club Txuri Berri de San Sebastián que, al igual que ocurrió con los chicos, sumaron sus diez encuentros disputados por victorias. La jugadora leonesa suma así dos medallas de plata y tres de bronce en sus años de competición en el mundo del curling.

La nota negativa del campeonato la puso el equipo masculino del León Curling, que a pesar de realizar un más que aceptable torneo con dos victorias ante rivales directos, no pudo evitar ocupar una de las dos plazas de descenso al serles adversos los resultados de la última jornada. Los leoneses perdían el último día dos encuentros por la mínima, lo que unido a la sorprendente victoria del segundo equipo de Txuri Berri ante los locales del C.H. Jaca condenaba a los jugadores leoneses a la segunda división. Ahora es el momento de reconsiderar la situación para un club que, sin pista de hielo en donde entrenar a pesar de haber presentados varios proyectos para ello y agotado ante la falta de apoyos y la desidia de las instituciones con los deportes de hielo, tendrá que plantearse si merece la pena seguir llevando el nombre de la ciudad por toda España.