Lo que sí y lo que no es cierto en las criticas del FMI a la gestión del Gobierno

Por supuesto, alertan de la alta deuda pública, que podría cerrar el año en el 120% del PIB, pidiendo "encaminar la deuda a la baja".

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(Foto PSOE)

Recientemente, Pablo Casado, líder del PP, se vanagloriaba de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le daba la razón a su partido sobre las críticas al Gobierno de coalición por su subida de impuestos planteada en los Presupuestos Generales de 2021.

Vayamos por puntos. El pasado viernes el FMI publicaba un informe en el que confirmaba que nuestro país sería el más castigados de las grandes economías por la crisis del coronavirus, con una caída del PIB en 2020 estimada en el -12,8%.

Cierto, aunque el Ejecutivo insiste en que estos cálculos no tienen en cuenta la mejoría del último tramo del año, por lo que se espera que cierre en torno a un -12%.

En todo caso, es verdad que el FMI, en su informe, cuestionaba algunas decisiones del Gobierno de Pedro Sánchez. Pero no la subida de impuestos, como han destacado partidos de centro-derecha, liberales y derecha, sino la subida de las pensiones y de los sueldos de los funcionarios.

Eran compromisos sociales del Gobierno que formaban parte de promesas electorales del PSOE y Unidas Podemos, las cuales cumplirán, sobre todo por presión de los morados de Pablo Iglesias.

Lo que se ha hecho bien

Sin embargo, el FMI sí que ha felicitado al Ejecutivo de coalición tanto por su política con los ERTE durante el confinamiento y posteriormente durante la pandemia, así como sus inversiones en sanidad o la subida de impuestos, sí, a las rentas altas, para conseguir mayor ingresos y mejor financiación del Estado.

Los autores del informe, dice el FMI, «acogieron con satisfacción los esfuerzos en curso para mejorar la progresividad fiscal y la capacidad de recaudación de ingresos, y alentaron nuevas reformas de las pensiones». Dicho de otra manera, entienden que se suban impuestos a los que más ganan.

El FMI también ha felicitado, literalmente, al Gobierno por «la rápida y contundente implementación de las medidas de apoyo a los ingresos y la liquidez para mitigar las consecuencias económicas y sociales de la pandemia». Es decir, el conocido popularmente como ‘escudo social‘ del que hablan desde Moncloa PSOE y Podemos.

En cuanto a las tan pedidas ayudas a empresas, el FMI también coincide con el Gobierno en que se debe «priorizar el apoyo de capital dirigido a empresas viables, con una estrategia de salida bien diseñada».

Aplausos generalizados

Las autoridades del FMI, además, «destacaron la fortaleza del sistema financiero» en su informe, pidiendo a las entidades financieras que hagan una «política de dividendos prudente», es decir, del reparto de sus beneficios a los accionistas.

Asimismo, acogieron «con satisfacción la intención de las autoridades de utilizar fondos europeos para respaldar la recuperación económica a corto plazo al tiempo que se promueve un cambio estructural hacia una economía más productiva, más ecológica y digital», la política verde de la que habla el Ejecutivo desde su vicepresidencia de Transición Ecológica.

Pero es que hay más: el informe aplaude otras políticas del Gobierno, como los «esfuerzos para fortalecer la red de seguridad social con la introducción del Plan de Renta Mínima» y fomentar «una mayor capacitación y reciclaje para los trabajadores desplazados, mejorando las prestaciones por desempleo, abordando la dualidad del mercado laboral y mejorando la igualdad de género».