Ahora León / Junta de Castilla y León
El diagnóstico del cáncer se enfrenta en la actualidad a complejos desafíos. Hasta hace unos años, el diagnóstico se basaba en los cambios puramente morfológicos en los tejidos afectos; pero actualmente es ya imprescindible contar con nuevas herramientas como la Inmunohistoquimia y las técnicas moleculares de análisis del DNA, para detectar cambios proteómicos y genómicos en el tejido que afiancen el diagnóstico, sugieran y refuercen el pronóstico y, en el caso de las llamadas dianas terapéuticas, decidan el tratamiento. Es decir, inciden de forma directa e intensa en lo que se conoce como Medicina Personalizada.
En este contexto, esta mañana el servicio de Anatomía Patológica se ha reunido para abordar el papel de las nuevas tecnologías en el diagnóstico anatomopatológico del cáncer. Este servicio señala que el Complejo Asistencial Universitario de León (CAULE) lleva ya tiempo involucrado en esta dinámica de actualización tecnológica, con una Inmunohistoquimia muy desarrollada y realizando técnicas de Patología Molecular en diversos terrenos, como Patología del Sistema Nervios Central, cáncer Colorectal, de Pulmón, Mama, Sarcomas, Melanomas, etc.
En el momento actual, se ha dado “un gran paso hacia adelante” con la incorporación de nuevas tecnologías, que suponen la consecución de un Hospital y un Servicio de Anatomía Patológica dotados de los instrumentos “más punteros y revolucionarios” en el campo del diagnóstico molecular de las enfermedades neoplásicas. Se trata de la Biopsia Líquida y de la Secuenciación de Nueva Generación, dos técnicas que actualmente se ofrecen en el complejo leonés.
La denominada Biopsia Líquida ayuda a conocer el progreso de la enfermedad neoplásica mediante el análisis de fragmentos de DNA circulante en la sangre periférica. Esta tecnología evita intervenciones y toma de biopsias más cruentas en determinadas situaciones clínicas, y es una de las grandes promesas en la estrategia de manejo del cáncer. Se debe remarcar que en el momento actual sólo está aprobada para uso clínico en cáncer colorectal metastásico y en cáncer de pulmón. “Desde el punto de vista experimental, es adecuada en otros tumores, no siendo todavía el arma útil en el primer diagnóstico inicial de las neoplasias, sino que sirve para el seguimiento del paciente diagnosticado por los métodos habituales”, señalan desde el servicio.
Por otra parte, la Secuenciación de Nueva Generación es una poderosa herramienta que mejorará la caracterización molecular de los tumores, supone un avance en el proceso actual de secuenciación genómica de los mismos, acorta el tiempo de análisis, aporta mayor información que las técnicas actualmente en uso y nos permite trabajar con muestras de tejido muy pequeñas. Además, detecta todos los tipos de variaciones genéticas en un único proceso, incluyendo amplificaciones, mutaciones puntuales, inserciones, deleciones, traslocaciones, etc, que estén afectando al tejido tumoral.
Por tanto, y como se ha abordado en la reunión de esta mañana, es “una satisfacción que el CAULE ofrezca a la sociedad leonesa este importante avance en el manejo de la enfermedad neoplásica”.
