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El secretario general del PSOECyL y candidato a la Presidencia de la Junta, Luis Tudanca, aseguró hoy que quiere para Castilla y León “un gobierno de cambio y esperanza que le devuelva la voz a Castilla y León” a partir de las elecciones del próximo 13 de febrero.
Así lo señaló Tudanca durante su intervención en el Comité Federal del PSOE, donde denunció la decisión “terriblemente irresponsable” de convocar elecciones por parte de Alfonso Fernández Mañueco “en el peor momento posible” y al que acusó de haber metido a los castellanos y leoneses “en el tablero de los juegos de poder del PP como si fueran piezas o rehenes de Casado y Ayuso”.
Por eso, tras asegurar que no tiene mayor compromiso que el que tiene con Castilla y León, Tudanca sostuvo que estas elecciones se celebran “para decidir el futuro de CyL”. “Eso es lo que nos jugamos, nuestro futuro, frente a quienes la han hecho invisible, frente a quienes no quieren que se hable de nosotros y querrán combatir contra fantasmas inventados, yo quiero hablar de CyL y su gente, de los retos que afrontamos, de nuestro proyecto, del papel y la voz de mi tierra en España”, remarcó.
El 13 de febrero, continuó Tudanca, CyL tiene la oportunidad de poner en marcha un gobierno “de cambio y esperanza” que le devuelva a Castilla y León la estabilidad imprescindible para afrontar con garantías “el momento decisivo” ante el que se encuentra.
Y eso, subrayó, solo se puede afrontar desde “el diálogo y el consenso”. Por eso, anunció que su primera decisión será convocar a todos los agentes políticos y sociales para impulsar un gran Pacto que culmine con la aprobación de unos Presupuestos y un Plan de reindustrialización que comiencen a construir “la Castilla y León del futuro” aprovechando la llegada de los fondos europeos.
“Ha llegado la hora de que nuestra tierra, por fin, apueste con ambición por la reindustrialización y el cambio en el modelo económico y productivo, que blinde los servicios públicos y garantice su prestación en igualdad a todos los ciudadanos vivan donde vivan”, incidió.
Un cambio para dar a Castilla y León, por fin, un gobierno decente que tenga como base que la política tiene palabra y se cumple y que no tolere sombra alguna sobre las actuaciones de los responsables políticos y que ponga fin a 35 años de gobiernos del PP.
En definitiva, dijo, un gobierno que le devuelva el futuro a los jóvenes, que apueste por la sanidad pública, por la igualdad de oportunidades y por la educación pública y que además haga frente, al fin, al reto demográfico y que apueste por la cohesión económica, social y territorial, que corrija los enormes desequilibrios que tiene Castilla y León, que apueste decididamente por la descentralización institucional y económica para garantizar que crezcamos.
“Sabemos qué necesita Castilla y León y tenemos la capacidad de hacerlo posible”, concluyó.
