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La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), junto con otras diez asociaciones de consumo también pertenecientes a la Organización de Consumidores Europea (BEUC), ha denunciado a la Comisión Europea las prácticas desleales generalizadas de las aerolíneas por violar los derechos de los pasajeros, al tiempo que ha solicitado una amplia investigación al respecto.
Desde el comienzo de la crisis sanitaria, OCU ha recabado miles de quejas y reclamaciones contra las compañías aéreas y plataformas de venta de billetes, siendo las más reclamadas: Ryanair (más de 3.100), Vueling (más de 2.500), Iberia (más de 2.000), eDreams (más de 1.900), Booking (más de 1.200), Air Europa, Last Minute, Rumbo (estas tres últimas con más de 600) y Easy Jet (más de 400).
A pesar de que nuestro Ministerio de Consumo anunció la presentación de una acción de cesación ante la práctica comercial de las compañías, OCU ha decidido unirse a esta acción ante la Comisión Europea ya que desde el comienzo de la crisis de la COVID-19, algunas de las aerolíneas más grandes de Europa no han reembolsado a los pasajeros de manera rutinaria y no han brindado información clara y completa a los pasajeros sobre sus derechos. Si bien ha habido prácticas injustas en toda la industria, la denuncia en este caso se dirige contra: Aegean, Air France, EasyJet, KLM, Norwegian, Ryanair, TAP Portugal, Transavia, por ser las aerolíneas con mayor número de quejas de los consumidores que se hicieron a OCU y al resto de asociaciones europeas.
Aunque la Organización reconoce que la pandemia supone un gran desafío para la industria de viajes, no es aceptable proporcionar información incorrecta y engañar a los consumidores sobre sus derechos, por eso se suma a una acción conjunta y coordinada a nivel europeo. Por ello, OCU en colaboración con BEUC y sus miembros están pidiendo a las autoridades que investiguen estas prácticas y obliguen a las aerolíneas a cumplir con la legislación de la UE sobre derechos de los pasajeros y los consumidores.
Según OCU y el resto de las asociaciones, las tres prácticas más denunciadas son: 1) obligar a los consumidores a aceptar bonos en lugar de reembolsos monetarios por vuelos cancelados; 2) no proporcionar información a los consumidores sobre su derecho al reembolso; 3) proporcionar información engañosa a los consumidores sobre sus derechos.
Estas prácticas constituyen una violación del Reglamento de derechos de los pasajeros aéreos de la UE, que establece que las aerolíneas deben informar a los consumidores sobre sus derechos en caso de cancelación de vuelos y dar a los pasajeros la opción de un reembolso monetario, cuando se den circunstancias extraordinarias como es el caso de esta pandemia.
