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Por primera vez desde que se fundara el Lioness Basketball, hace algo más de 3 años, el primer equipo del club, el Patatas Hijolusa, ha conseguido terminar la liga regular en primera posición de la tabla. Si bien es cierto que las dos últimas temporadas el equipo se había clasificado para la fase de ascenso, nunca lo habían hecho con un registro como el de esta temporada: 14 victorias y tan solo 3 derrotas, a falta de un partido por jugar.
Esta victoria tiene un mérito todavía mayor, además, porque las chicas de Óscar Barrera viajaron a Gijón con Silvia Fernández, uno de sus puntales ofensivos, lesionada. Sin embargo, el resto de las jugadoras dieron un paso adelante para suplir la baja de su compañera y, junto a un pequeño conjunto de aficionados que se desplazaron a Asturias desde León, consiguieron imponerse al Fodeba Gijón, que hasta ahora ostentaba la quinta plaza en la clasificación.
El primer cuarto fue de claro dominio visitante. El Patatas Hijolusa, consciente de lo que se jugaba, y con el apoyo de los aficionados, salió con un parcial de 7-0 de inicio. Las locales lograron reaccionar a mitad del cuarto y recortaron 5 puntos en el marcador (5-7), pero un nuevo empujón de las chicas de Óscar Barrera, que mostraron un gran acierto desde la línea de 3, llevó la ventaja a los 10 puntos.
La tónica no cambió en el segundo periodo, que comenzó con las leonesas controlando el juego con una defensa muy férrea. Cuando solo había transcurrido un minuto de este cuarto, el entrenador local recibió una falta técnica debido a sus protestas, a la que siguió casi inmediatamente una falta descalificante. Mientras tanto, el acierto exterior del Patatas Hijolusa seguía siendo alto, con una Sofía Vélez que encontraba el aro con facilidad con varios triples. Las locales, por su parte, seguía atascadas en ataque, y solo algunas acciones puntuales de Elisa Álvarez (máxima anotadora del partido con 22 puntos) conseguían ralentizar la sangría. Al descanso, el marcador reflejaba un 15-31 que no presagiaba nada bueno para las asturianas.
Tras el paso por los vestuarios, el Fodeba Gijón volvió a la cancha con mayor ímpetu y, poco a poco, fue recortando puntos en el marcador: el tercer cuarto terminó con un 34-47 y, durante el último cuarto, las locales llegaron a recortar la ventaja hasta los siete puntos de diferencia. Sin embargo, una gran actuación de Irene Martínez y Débora González, que fueron capaces de encontrar el aro cuando su equipo más lo necesitaba, hizo que la ventaja del Patatas Hijolusa nunca llegara a peligrar. Al final, 48-58 y una victoria que vale una liga.
Una vez el partido hubo terminado, las jugadoras y el equipo técnico se unieron a la afición en la grada para celebrar la victoria. Los festejos, no obstante, no durarán mucho, pues Óscar Barrera y su equipo ya están empezando a planear la fase de ascenso con el objetivo de mejorar la actuación de pasadas temporadas. Todo esto sin descuidar el último partido de la temporada regular (domingo 10 de marzo a las 18:30 en el Pabellón San Esteban), que, a pesar de ser intrascendente a nivel de clasificación, será importante para afrontar la segunda fase de la temporada en el mejor momento de forma posible.
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