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El portavoz de Agenda Urbana del Grupo Popular y senador por León, Antonio Silván, recriminaba hace unos días a ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, que, siete años después de la llegada del Ave a León con el gobierno del Partido Popular, “la línea Valladolid-Palencia-León sigue sin ser declarada de Obligación de Servicio Público (OSP)”. Una medida que daría a leoneses y visitantes la opción de obtener bonos, descuentos y la llegada de los servicios Avant a la provincia.
No solo eso, si no que el Gobierno socialista de Pedro Sánchez sigue vetando la rebaja del canon ferroviario impuesto en España, lo que repercutiría entre un 45 y 50% en la bajada del precio de los billetes. Dos medidas fundamentales que el Grupo del Partido Popular en el Senado llevará este martes a la Cámara Alta, la necesidad de aplicar la liberalización ferroviaria (acceso a otras empresas a competir con Renfe) a todo el territorio, no solo a los ejes radiales de Barcelona, Valencia y Sevilla, junto a la declaración de OSP para todas las líneas AVE; lo que supondría para León más servicios, trenes y a menos precio.
La falta de medidas y de una gestión eficaz del Ejecutivo ha causado un caos en la política ferroviaria que “solo ha agrandado las diferencias entre los territorios, llevándose León la peor parte con el Partido Socialista, con las consecuencias que tiene en la actividad económica y turística de la provincia”.
Silván ha explicado que la moción que va al Senado defiende al transporte ferroviario de pasajeros como imprescindible “para garantizar la movilidad de las personas y la vertebración territorial de nuestro país. Se hace indispensable, por tanto, impulsar el ferrocarril como transporte rápido, moderno, sostenible, seguro, que sea capaz de competir con otros modos de transporte y que sea un instrumento para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Para lograrlo se ha procedido a liberalizar el transporte ferroviario de viajeros. Una liberalización, que, a día de hoy, es de servicios mínimos y no ha llegado a cumplir el objetivo de rebajar el precio del billete plenamente”.
El senador insiste en que la gestión socialista ha supuesto que “cada día hay para León, los leoneses y visitantes menos trenes, menos frecuencias, menos conexiones, pero, eso sí, los billetes son escasos más caros. Por eso denunciamos que el AVE sea entre un 40% y un 50% más caro de lo que debería ser y, además, perdiendo 1,5 millones de nuevos viajeros en España, por el canon ferroviario que el Ejecutivo se niega a rebajar”.
El canon ferroviario es determinante para un billete más barato ya que la mitad de su precio depende de este valor. “Por ello sería conveniente rebajarlo para reducir el precio de los billetes lo que provocaría un aumento de la demanda y generaría más oferta facilitando la entrada de nuevos operadores ferroviarios”.
La moción incluye que la liberalización ferroviaria tiene que llegar a otros servicios, no sólo en las líneas del AVE. Por ejemplo, en los servicios regionales en las zonas menos pobladas la solución pasa por liberalizar la media distancia y que empresas con empuje apuesten por estos servicios y atiendan las líneas de menos viajeros, eso sí, siempre con el respaldo de la Administración. Asimismo, se debe extender a todo el territorio nacional, como por ejemplo al Norte y Noroeste del país.
Por lo tanto, “es preciso que el Gobierno siga impulsando de forma decidida la liberalización ferroviaria de viajeros para que sea realmente efectiva y que se traduzca, a su vez, en un incremento de las frecuencias, en una mejora en la calidad del servicio y en la bajada del precio de los billetes, renunciado a su vez, a medidas, como la planteada por el Presidente de RENFE que apuesta por la implantación del pago por el uso de las autovías como una medida que favorecería el trasvase de viajeros de la carretera al tren. Además, hay que recordar que la Alta Velocidad está inacabada en muchos territorios por lo que es necesario terminarla para evitar diferencias entre territorios”.
