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“Esta exposición está abierta a todos los alumnos que quieran venir y dejar escrito dentro de un sobre, aquel pensamiento que les pesa o que ha supuesto una carga a lo largo de su educación y su vida”. La artista Vegonha Rodríguez, autora de la intervención ‘Me pesan las raíces’, explicaba así la intencionalidad de su obra al término de la performance realizada esta mañana con alumnos de Historia del Arte en el hall de la Facultad de Filosofía y Letras, acompañada por la música compuesta por David Iturregui.
Un grupo de ocho alumnos han escenificado una acción en la que en un lado han depositado sus cargas (representadas en forma de telas, lanas…), para luego transitar hacia un espacio “hermoso en el que nos sentimos bien y en el que encontramos lo que queremos ser de verdad”, señala Vegonha Rodríguez al tiempo que matiza cómo los condicionamientos sociales, religiosos o familiares “nos hacen actuar en la vida de una forma que no es acorde con nuestro pensamiento. Hacemos cosas que nos hacen sentir mal, tenemos hijos que no hubiéramos querido tener, tenemos matrimonios que no habríamos tenido, pero que hacemos porque se supone que es lo que hay que hacer”.
Los sobres que han ido dejando al pie de los árboles los estudiantes son los pensamientos escritos “que se dejan ahí porque son las cargas que has llevado durante tu vida”. Sin embargo, la propuesta de Vegonha Rodríguez para la XXIII edición de El Hall Transformado, no concluirá cuando acabe la exposición; su idea es recoger todos los sobres que en el transcurso de dos meses hayan dejado los estudiantes y enviarlos a un grupo de alumnos de Psicología de una universidad sudamericana. “Aún no tengo concretada la universidad, pero me gustaría que fueran estudiantes con una realidad social completamente diferente a la nuestra. Recibirán los sobres y ellos serán los encargados de dar respuesta a esas cosas que en nuestra sociedad o cultura nos están atormentando”. La conexión con ese grupo de estudiantes se hará a través del Facebook de El Hall Transformado, “así será una forma de dar continuidad a la exposición”.
Vegonha Rodríguez es una artista que llega a la escultura por casualidad. Se matriculó en la Escuela de Arte de León con la intención de continuar con los estudios de interiorismo en Oviedo, pero tras trabajar el barro y el volumen decidió cambiar de rumbo y se trasladó a Valladolid para realizar el ciclo de Moldeado y Vaciado en la Escuela de Arte de la ciudad. Comenzó su trayectoria artística modelando y haciendo obra cerámica, pero pronto dio el salto a otros materiales como piedras, metales y telas. Ahora llega al Hall Transformado con una propuesta donde impera su interés por la naturaleza.
En palabras de Roberto Castrillo, coordinador de la iniciativa del Hall Transformado y profesor de Historia del Arte de la ULE, Vegonha Rodríguez recrea un bosque colorista “salpicado de estímulos plásticos, un jardín pintoresco generador de hermosas experiencias sensoriales. Un contrapunto estético a la poderosa simetría monócroma del edificio. Los árboles y figuras que conforman este lugar apacible y melancólico aparecen como elementos frágiles y esbeltos que invitan al espectador a recorrerlo con lentitud y receptividad al diálogo que propone la artista”.
La artista sugiere a quienes estén dispuestos a habitar este bosque que existe una posibilidad de “liberación a través del espacio poético; por ello, de los árboles penden sobres vacíos dispuestos a albergar palabras que describan aquello que impide a cada sujeto desplazarse hacia espacios abiertos”, concluye Roberto Castrillo. ‘Me pesan las raíces’ se mantendrá expuesta en el Hall de Filosofía y Letras hasta el 3 de diciembre.
