Noticias de León / Ahora León / Imagen: S. Arén / San Marcelo
El alcalde, Antonio Silván, ha mostrado su gratitud y orgullo a los 205 miembros de la Policía Local de León “por vuestro espíritu de sacrificio y vocación de servicio al ciudadano todos los días del año y a todas horas del día”. El alcalde ha destacado que este cuerpo “realiza cada día funciones preventivas, asistenciales, de atención al ciudadano, etc.; una suma de actuaciones, de acciones, de esfuerzos, en las que siempre se observan vuestras señas de identidad: profesionalidad, responsabilidad y rigor”.
Un reflejo de ese amplio espectro de funciones y de la íntima relación del Cuerpo de la Policía Local con la sociedad leonesa son las condecoraciones que se han otorgado hoy en la Plaza de Regla, a los pies de la Catedral. “Seis reconocimientos a principios y valores como la suma de esfuerzos, la solidaridad, el espíritu de superación y la colaboración ciudadana”, señaló.
La presidenta de La Audiencia Provincial, Ana del Ser, ha recibido la Medalla al Mérito de la Policía Local, con distintivo de plata, porque “a lo largo de su larga trayectoria profesional en la ciudad de León se ha distinguido por su esfuerzo y abnegación en la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos, por su profesionalidad y tesón en defensa de la legalidad, contribuyendo desde su relevante puesto a la mejor coordinación entre las fuerzas y cuerpos de seguridad en relación con la administración de justicia; especialmente por su colaboración con el cuerpo de la Policía Local”.
También recibió la Medalla al Mérito de la Policía Local con distintivo de plata el presidente del Comité Provincial de Cruz Roja Española en León, José Ignacio de Luis Páez, por “su estrecha vinculación con la Policía Local de León en todas su facetas debido a su condición de ciudadano, leonés, militar y desempeño de diversas responsabilidades en Cruz Roja que le han llevado a colaborar de manera continuada con la Policía Local en múltiples aspectos tales como prevención, seguridad, intervención en emergencias, formación, etc., y especialmente en su faceta más humanitaria”.
Los dos agentes de la Brigada Especial de Seguridad Ciudadana que fueron brutalmente agredidos el pasado 4 de agosto recibieron la Medalla al Mérito de la Policía Local del Ayuntamiento de León por su intervención en los sucesos acaecidos aquellas madrugada, junto al ciudadano que, sin pensar en las consecuencias, les ayudó y alertó con sus llamadas al 112, “demostrando un extraordinario sentido de la responsabilidad y humanidad y poniendo en riesgo su integridad física para auxiliar a un miembro de la Policía Local que se encontraba en situación de extrema gravedad”.
Y, por último, el policía Félix Casado García recibirá la Medalla al Mérito de la Policía Local con distintivo de plata tras participar entre los días 11 y 19 de junio en los VI Juegos Europeos de Policías y Bomberos celebrados en Huelva y conseguir la medalla de oro en las disciplinas de kick boxing y lucha k1. Unos juegos que está considerados como la competición de mayor concentración atlética no profesional de toda Europa con más de 14.000 participantes y en la que participan efectivos de los distintos cuerpos de seguridad de los distintos estados, especialmente policías, bomberos, unidades de emergencia y ejército, además de deportistas de países invitados como Brasil, Estados Unidos, Canadá y China.
También fueron condecorados 20 agentes que cumplen 25 años de servicio y Pedro Sánchez Franganillo, que este año se jubila. Además, el alcalde entregó una placa conmemorativa a la Banda Municipal de Música “por su trabajo y su siempre espíritu colaborativo con el Ayuntamiento, con nuestra Policía Local y con la ciudad, y que hoy tiene su merecido reconocimiento”.
Historia de San Marcelo
Un sábado, 29 de Marzo de 1.493, los restos del centurión Marcelo, hallados en Tánger donde fue martirizado, llegaron a León traídos por el rey Fernando V. Su lauda sepulcral le titulaba leonés, y en la ciudad se le hacía culto desde varios siglos atrás. Fue depositado en la iglesia de su nombre. Convertido en patrono de la ciudad, el Ayuntamiento conmemoraba este día, que para no coincidir con las liturgias de Semana Santa se trasladó al martes de Pascua. Popularmente, la festividad del patrono era honrada con el mayor de los acontecimientos: la feria.
En el documento de concesión firmado por Enrique IV en 1466, se dice que “Comiense quinse días antes de Todos los Santos e quinse días depués”, la festividad está comprendida en ella y se la titulará con ambos nombres, la feria de San Marcelo o Todos los Santos. Era la feria más importante de la ciudad (mediados del siglo XVIII). En el culto a San Marcelo y su implicación municipal hay dos fechas que deben considerarse importantes: el rescripto pontificio declarando su festividad en octubre y la reunión de una comisión para la asistencia de la Corporación a las fiestas religiosas de la ciudad, que incorpora el día del santo.
